Gracias Nacional!

Pasarán los años y el sentimiento no será el mismo. Será mucho mayor y mejor. Fiel de toda fidelidad al BOLSO. A mi querido cuadro centenario;... a 20 años de una de las emociones más sentidas recibidas por mi desde su gloriosa andadura, mi recuerdo mágico de esa noche inolvidable. El mismo que hace un año pude expresar aquí según lo dictaba el corazón y mi extraordinaria memoria. ¡Cómo olvidar la felicidad! Era pibe, de acentos porteños, pero botija de corazón. Fachada aporteñada, con sentimiento bien uruguayo mi presencia. Regresaba a MONTEVIDEO y NACIONAL llamándome al URUGUAY. Convidándome a la fiesta reservada para los suyos. Acepté gustoso el convite. Me fui a dar riendas sueltas a tanta nostalgia acumulada de emigrante uruguayo en la Argentina. Crucé el charco deseando ver a los míos, deseando abrazarlos pronto, todos en BLANCOS colores irnos juntos a la fiesta en el ESTADIO. NACIONAL esperaba gozoso, tenso también por la llegada de su Pueblo de 19 puntos cardinales de Tierra oriental propia y mucho más de otras extranjeras. En comunión todos junto al BOLSO, para festejar la alegría de ser NACIONAL y nosotros solos, UNO en la pelea. Siempre UNO y hasta que el cielo caiga sobre nuestras cabezas. Faltaba poco para dejar los sueños del TRI. Era la hora y el sueño sería realidad, por tercera vez. Yo estuve y jamás, pero jamás olvidaré tanta emoción. Como en 1971 sentadito en el cordón de la vereda porteña llorando la primera; ...como en 1980 abrazados fuertes, muy fuertes a mi querido viejo y a VALENTÍN en la neblinosa noche en el TALUD del gol de la AMSTERDAM de Victorino. Era tiempo de una tercera y fue no más. '...faltaban dos días... no entraba en mi cuerpo. Era lunes de octubre de 1988 y preparando el equipaje. Me engalano el pecho con la TRICOLOR!;..agarro el bolso y me lo pongo al hombro. Beso a la vieja y a mis hermanas porteñas (mi viejo en el laburo y mis hermanos en la Facultad), y despidiéndome de ellas les digo:...juro que 'el miércoles NACIONAL me regala 'el tri' y les traigo la COPA LIBERTADORES de AMÉRICA en el corazón'. Me voy pal´puerto solito. Ya era grande para caminar mis sueños sólo. Las porteñas niñas deseaban al gauchito oriental, pero éste sólo pensaba en no fallar al NACIONAL de su vida (..que esperen dije, …al regreso, la semana próxima tendré fuerzas para ellas). Atrevido yo, que no hay pierna femenina que no perdone sin mirar, sin intentar algo más, juro que durante ese viaje no las vi. Marché ciego de euforia futbolística para Montevideo. Mi objetivo era pisar mi amado MONTEVIDEO cuanto antes. No había tiempo para distracciones curvilíneas. Atravesé la capital porteña, con mi bolso, pertrechado con mudas para una semana en el pago oriental. ¡Qué alegría tenía! Volvía a mi casa y NACIONAL alimentando esa alegría inexplicable de transmitir en palabras. Mi BLANCA cubría el corazón que a esa hora ya latía intensamente. La “más linda” daba mayor brillo a mi sonrisa de inminente campeón. La procesión estaba y yo peregrino partía rumbo la meca del fútbol mundial. Me esperaba el cruce del Plata. El barquito de nombre de gurí me llevaría a casa y allí sentía sin dudas, que la COPA esperaba, que sería mía, de todos los nacionalofilos. Ya era puerto y el marrón Río de la Plata, se presentaba listo para llevarme en “aguante” TRICOLOR. Contento por respirar pronto MONTEVIDEO, embarco altivo. En la cubierta el aire llena mis pulmones de oxígeno nuevo. Lo voy a necesitar en dos noches, para gritar fuerte el nombre hermoso de mi cuadro. La brisa despeina mis enrulada melena de león, por entonces (hoy sin perderlo se parece más al pelaje de un gatito mimoso). Crespo el cabello, latiendo el corazón a mil, la sonrisa de oreja a oreja, los nervios dibujando tensión en los músculos, me voy pal' URUGUAY. La euforia que siento en la cruzada me hace vibrar como en el 71 y 80. Siento que ésta vez no será distinta. Siento que soy gladiador a punto de salir a la arena. Cierro los ojos y sueño con el TRI de mi amado TRICOLOR! Me adelanto entre sueños al acontecimiento y me imagino un Centenario lleno hasta la torre de los homenajes. Me imagino una noche de match, huérfanas de habitantes en las calles del URUGUAY todo. Vacío de 'gentes' propias y de la contra. Silencioso el pago, colgados todos del televisor a la hora señalada. Unos (la mayoría), deseando la victoria del 'primer criollo', los otros cinchando por el 'leproso' rosarino. ¡No aprenderán jamás los otros!
Mi presencia en el barco (directo a Montevideo), con la gloriosa camiseta puesta delata ante los argentinos de Rosario mi sentimiento. No tengo temor ni me amedrentan. Hay argentinos cerca, bastantes diría! Me rodean sin entender si voy o si vengo! Presiento su confusión y me agrando más, del agrande que llevo. El 0 a 1 en Rosario no es lapidario para el TRICOLOR y ellos dudan de su futuro. No los noto seguros de sus fuerzas rojinegras. Rosarinos hay en cantidad importante en el barco, casi todos también vestidos en rojo y negro. La mayoría no me ofenden! Respetan mi blusa! Presienten que lo peor es posible. Abren paraguas. El 1 a 0 en Arroyito a su favor, no les ofrece confianza! ..'Es que los uruguayos son bravos, me dicen. Uds. tienen un cuadro bien uruguayo, con mucha garra y es difícil pasarlos, repiten'. 'Son todos gigantes afirman'. El más petiso es el arquero! Sonrío calmo, como sabiendo el desenlace tan deseado para mi. Me compadezco con ellos. Me callo y digo una sola cosa! El miércoles 26/10/88 los gigantes serán aún más todavía! Presiento la victoria. Es confianza ciega, la que tengo. Ese equipo la transmite! Llega la noche de la FINAL. Vamos al Estadio en familia. Mi Padrino al frente! Trepamos la AMSTERDAM antes que anochezca. Los rosarinos son muchos y están en la COLOMBES contra la AMÉRICA. Llega el PUEBLO TRICOLOR en éxodo. ¡Conmueve verlos llegar! Abuelos, Abuelas; Padres, Madres, hijos, nietos todos con algo TRICOLOR entre sus prendas. Falta más de una hora para el inicio y no cabe ni un alfiler, y entran y me pregunto si aguantará la estructura de hormigón del viejo Monumento del Fútbol Mundial. Se siente vibrar como nunca sentí antes. Hay banderas de todos los pueblos del interior uruguayo. De todos lados! Los 19 Departamentos representados en las tribunas del Centenario. Cae la noche. Los periodistas sacan fotos a las tribunas. Unos japoneses gastaron todos los rollos que trajeron, sacándonos fotos a nosotros en las cuatro tribunas del Estadio. Se viene la fiesta....! Sale un muchacho con una enorme bandera TRICOLOR y anticipa la vuelta olímpica, arrancando desde la AMSTERDAM, encara la OLÍMPICA, mirando a la COLOMBES. Lo hace en sentido inverso de las agujas del reloj. Clama el Estadio la gallarda TRICOLOR. ¡Cómo flamea! ¡Qué espléndida y enorme! ¡Qué preciosa, DIOS mío! La historia va con ella. Estremece de sólo verla. Emociona hasta los tuétanos. Y lo mejor aún no empieza. Los espíritus del pasado secundan su estela triunfal. Van con la bandera nuestros cracks del pasado iluminando su paso desde el cielo de la gloria. Nuestros seres queridos en otra dimensión, abrazados, alientan con nosotros también. No tengo dudas. Recuerdo al viejo en Buenos Aires, pegado al televisor, intentando encontrar la aguja de mi presencia en el pajar enorme de un Pueblo en las tribunas. Imposible. Mira y como yo, estará recordando otras tardes juntos. ¡Cómo en 80 contigo viejo querido, pero ésta vez abrazado igual a la distancia! El corazón se me estruja. No aguanto más. Quiero guerra. Quiero arena. Quiero victoria. Los ojos se humedecen. No puedo evitarlo. No quiero evitarlo! Soy hombre, lloro y ta ! Estamos todos! 80000 o 90000 personas pegadas, sin espacio para transpirar, ni sacar los pañuelos de los bolsillos. Sentados en las escaleras, sobre las cabezas, sobre los muros, pero felices. Sin incidentes. Confían. Confío yo y mucho! Lo saben todos. Se que NACIONAL será campeón!....asoma alguien por el túnel. Me preparo y conmigo mi familia, la tribuna entera y respiramos bien hondo para soltar el grito de guerra y sale !un NACIONAL no más !, que no puedo explicar. Libero el grito de guerra atragantado en la garganta desde que salí de Buenos Aires. Sale de mi alma buscando la victoria al cielo montevideano! Encabeza HUGO DE LEÓN la hilera de gigantes, todos vestidos de maravilloso BLANCO. El capitán al frente!,... y el PUEBLO TRICOLOR estalla en pirotecnia, en aliento ensordecedor. NACIONAL NO MAS se escucha al unísono! ...y entran mis recuerdos de botija a traicionarme (esa noche tenía 28 años), a emocionarme más que el propio espectáculo,... y extraño quienes no pudieron venir conmigo hasta el escenario monumental... Me quedo en silencio! Raro en mi, pero en silencio disfrutan mi vista y el corazón, pero escuchando tenuemente los gritos enfervorizados de los NACIONALES que me rodean! Silencio raro entre tanto estruendo, llega a confundirme. Parece magia. Me estremecen los fuegos artificiales, pero quedo callado y veo a los rosarinos, su hinchada y futbolistas 'impávidos', 'estupefactos' como nos ven ellos a nosotros. Mirándonos en las tribunas sin creer, nos ven! Nos miraban a nosotros y no podían creer tanto despliegue, tanta fiesta! Dirían, justo éstos yoruguas, vienen a destaparse así contra nosotros. Los perdono, los conozco, porque no saben nada de nosotros. Siempre subestimaron nuestro amor propio. Se creen que porque somos pocos, poco alentamos, poco gritamos, poco creemos. ¡Qué equivocados han estado siempre! Les juro, aprendieron una gran lección. Por mucho que haya soñado, jamás imaginé el recibimiento que su Pueblo tributó esa noche al NACIONAL de mi vida. No hubo nada a la fecha comparado al recibimiento brindado a NACIONAL la noche de 26-10-1988. En ese momento NACIONAL hizo su primer gol en la final del TRI. Luego llegaron, la media vuelta de VARGAS y el cabezazo de OSTOLOZA contra la COLOMBES y en la prórroga el penal a CASTRO con la conversión del HUGO en la AMSTERDAM, para el 4 a 0 final (no me equivoco cuando digo 4 a 0). La CSF dijo que ganamos 3 a 0. Debe ser cierto, pues yo lo también en el placard! Les juro que el primer gol lo hicimos los HINCHAS al momento mismo 'que al campo venían saliendo los ALBOS'. Hoy como siempre todos en UNO con el glorioso NACIONAL!
Gracias NACIONAL por recordarme que tengo sangre; que soy humano, que me emociono, que sigo siendo mucho por ti, agradecido a la vida.
A 20 años de aquel maravilloso triunfo de un Pueblo fiel y su bravío cuadro… Salud NACIONAL campeones todos!