martes, 5 de agosto de 2008

La cantera inagotable


Las recientes transferencias de Fornaroli y Cardaccio al fútbol italiano confirman el positivo cambio de timón que hace varios años dio Nacional en su trabajo de divisiones formativas, el cual se ve reflejado en las exportaciones concretadas por cada club en los últimos 5 años.
Desde 2003 en adelante Nacional está al tope en cantidad de pases a Europa, igualando a Danubio que es el eterno líder en esta materia, no en vano se le conoce como la 'Universidad del Fútbol del Uruguay'. Ambas instituciones vendieron un total de 11 futbolistas a equipos europeos en estos últimos 5 años, pero la cantera tricolor le saca ventaja a la franjeada pues los 11 que emigraron desde Los Céspedes aún están en el viejo continente, en cambio de los danubianos quedan 8, porque Sosa, Curbelo y Salgueiro ya cruzaron el Atlántico en viaje de regreso.
Este informe solamente toma en cuenta pases a clubes de Primera de países europeos que se hayan registrado desde 2003 en adelante y siendo jugadores surgidos en ese club y que no hubieran emigrado con anterioridad. Por ejemplo, no cuentan casos como los de Walter Surraco, del semillero aurinegro, que abandonó Peñarol mucho antes del 2003 y varios años después pasó desde Sud América a Finlandia.
DEFENSOR EN LA ÉLITE
Durante años, décadas, Danubio era el número uno por lejos en este rubro, tanto en cantidad como en calidad de jugadores transferidos a los mercados más importantes del mundo, lo que valoriza aún más lo que ha conseguido Nacional en el último lustro, al colocar en Europa tantos y tan buenos futbolistas como los que vendió Danubio.
Opacado por este logro de Nacional pero con méritos que merecen el mayor destaque aparece Defensor Sporting, que en estos 5 años metió en el viejo continente 9 productos de su semillero, apenas dos menos que tricolores y danubianos. Pero bien que el violeta puede vanagloriarse de contar entre sus embajadores con dos que están en la elite del fútbol mundial: Cáceres en Barcelona y Viudez en el Milan.
PEÑAROL Y PÚA
Relegado por culpa de su propia desatención al fútbol juvenil, Peñarol figura lejos de los otros tres clubes, con apenas cuatro valores de su cantera colocados en Europa, y uno de ellos (Bueno) ya pegó la vuelta. Y para colmo de males, por tres de esos cuatro pases no recibió ni un euro (sólo por derechos de formación). El 'Proyecto Púa' y el complejo de la Avda. Gianattasio son augurio de un futuro más alentador para el carbonero, que está pegando hoy el cambio de timón que dio Nacional hace muchos años, por lo que, tal vez dentro de un tiempo, logre similar cantidad de exportaciones que su tradicional rival.
Nacional desde años, y Peñarol desde hace meses, se dieron cuenta que Danubio y Defensor le estaban ganando terreno. Defensor avizoró hace un par de décadas que no habría futuro si no apostaba a las divisiones menores, y así inició un proceso serio con el profesor César Santos en el Complejo Pichincha. Danubio fue pionero en su dedicación a los juveniles, y el primero en construir un gran complejo para formativas (el 'Ing. Del Campo') que está en permanente remodelación, y con los ingresos por las últimas transferencias construirá un complejo para divisiones infantiles.
EL CAMBIO TRICOLOR
Durante años, los juveniles tricolores no encontraban oportunidades en el plantel principal, y así comenzaban desalentadores periplos por clubes menores, a los que iban cedidos a préstamo, sabiendo que no regresarían más. En los cuatro años que duró el ciclo de Hugo De León (1998-2001), solamente fue ascendido a Primera un producto genuino de la cantera: Gustavo Varela. Los demás tuvieron fugaces pasajes y los dejaron libres tras cederlos a préstamo a clubes chicos.
Es con Lasarte cuando comienzan a aparecer unos cuantos valores de la cantera (Suárez, Cardaccio, Fornaroli) y otros se ganan un puesto en el primer equipo (Albín, Valdez), y todos ellos terminaron engrosando esta lista de 11 pases al fútbol europeo, que sitúan a Nacional como líder, junto a Danubio, en estos últimos 5 años.

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